Os propongo una cosa. A ver si entre todos conseguimos elaborar una lista que podríamos llamar «Cien formas de volver loco a un colaborador«. Se trata de listar comportamientos que hayamos visto/experimentado en nuestra experiencia profesional y que sean fórmulas infalibles para volver loca a una persona y terminar con cualquier atisbo de motivación y satisfacción en el desempeño de su trabajo. Entendamos colaborador de forma amplia: un empleado, un subordinado, un compañero, un proveedor de servicios… todos aquéllos que se supone que son necesarios para lograr el objetivo de la empresa/negocio/departamento, pero a los que aun así, incomprensiblemente, se boicotea desde dentro.
Empiezo yo, pero id añadiendo vuestras ideas en los comentarios. Iré actualizando el post con vuestras aportaciones, nombre y link. ¡Seguro que nos salen un montón! La estupidez humana es inabarcable… ¡animaos!
1. Enséñale un proceso de actuación, y remárcale la importancia de seguirlo a rajatabla. Cuando actúe de acuerdo al proceso, dile que debía haberlo hecho de forma diferente.
2. Dile que una tarea es muy urgente. Cuando la haya completado, ignora el resultado durante días. O mejor aún, ignóralo para siempre.
3. Anímale a hacer las cosas a su manera, dile que tiene autonomía. Cuando haga algo, critícale por no hacerlo de la forma que tú lo habrías hecho.
4. Convocale a una reunión importantísima para la que tiene que prepararse a fondo. Cuando llegue la hora de la reunión, dile que se canceló hace unos días, ¿no le avisaste?.
5. Cuando revises sus escritos, olvida el contenido, y centrate en corregirle esa falta de ortografía.
6. Dile que te espere hasta que tú vuelvas de una reunión para tratar un tema. Cuando salgas de la reunión, vete a casa directamente y no le avises.
7. Fomenta con circulares y carteles la presentación de sugerencias. Cuando alguien presente una, dile que no le pagas por eso.
8. Cuando te lo cruces en el pasillo, dile «buenos días» o ignorale de forma aleatoria. Cuando él no te salude, échaselo en cara.
9. Cuando tengáis que hacer un viaje de negocios, reserva tu asiento en business y el suyo en turista.
10. Niégate a pagar dietas durante la realización de un trabajo porque el presupuesto no lo soporta. Cuando te reúnas a comer con el cliente, pide el vino más caro que haya en la carta y asegúrate de contárselo a todo el mundo cuando vuelvas.
11. Dile que cuente contigo para solucionar cualquier duda que tenga. Luego no le respondas al teléfono, no contestes sus emails y sal corriendo fingiendo estar superocupado en cuanto le veas dirigirse a tu puerta.
12. En cualquier documento brillante que elabore, encárgate de poner tu nombre bien visible antes del suyo aunque no hayas tenido nada que ver.
13. Si tienes que echarle una bronca, hazlo con la puerta abierta y a ser posible en público, que se entere cuanta más gente mejor.
14. Déjale claro que necesita tu autorización para cualquier cosa. A partir de entonces, ignora sus peticiones de actuación. De vez en cuando, pregúntale por qué no está hecho el trabajo.
15. Un día antes de iniciar sus vacaciones, dile que necesitas que se quede. En los días siguientes, haz como si no estuviera.
16. Dale un grueso manual «para que se lo empolle». En adelante, no vuelvas a mencionar el manual, ni la materia sobre la que trataba.
17. Atiende tantas llamadas telefónicas como sean necesarias (inicia alguna tú también) mientras él espera sentado en la silla de delante. Cuando haga amago de irse, hazle un gesto indicándole que espere, que «sólo será un momentito»
18. Retírale, en mitad de un trabajo, la mitad de su equipo para asignarlos a otras tareas importantes como, por ejemplo, ordenar el archivo.
19. Cuando te pida ayuda, pon cara de fastidio y haz referencia a que, en tu época, la gente se lo curraba más.
20. Renvía de forma inmediata, y marcándolo como urgente, cualquier comunicación del cliente que incluya una queja. Olvidate de renviar cualquier comunicación del cliente que incluya halago o felicitación.
… (¡sigamos!)
Me llamo Raúl y me gusta compartir ideas, reflexiones y herramientas para tener una vida más sencilla, equilibrada y significativa. Cientos de personas ya se han suscrito a mi newsletter semanal gratuita. Más información, aquí
Que mente más perversa madre mía. Y que eufemismos, más que volver loco eso lo conozco yo como putear en toda regla 😛
Pero vamos, que aquí están mis dos granitos de arena:
21. Dile que le está permitido llegar un poco tarde por si tiene que llevar a los niños al colegio o llevar el coche al taller. Cuando llegue asegurate de llamarle la atención por su retraso delante de todos.
22. Déjale caer que en la oficina puede consultar su correo y otras páginas personales siempre que tenga terminadas sus tareas porque el jefe lo que valora es la productividad. Cuando éste «le pille» muestrate indignado y llamale vago.
A ver si se logra llegar a los 100!
23. Una vez definida la tarea, justo cuando la tenga casi terminada, explícale al colaborador que faltan cosas, mostrando una gran indignación, y haciendo notar la obviedad y lógica de esa cosa, que, obviamente… no tiene nada de necesario en la tarea original, pero que queda muy bien…
24. Vendele al cliente algo que haga 10 cosas, transmite 8 al colaborador, y dejate las dos mas importantes y que mas complican el diseño…
25. Sin motivo aparente, olvídate de su existencia, hasta el preciso momento en que tu trabajo vaya mal, momento en el cual, obviamente, la culpa es suya que no hace nada.
26. Desautorízalo por sistema delante de todo el mundo, y cuando tengas un problema, llámalo colmándolo de halagos en el mas absoluto de los privados… y cuando quede resuelto… la culpa fue suya que no previó el problema.
27. Utiliza el medio corporativo de comunicación sólo cuando esté de vacaciones, el resto del tiempo… ignóralo, no hay nada importante que decirle.
28. Cítalo a primera hora, incluso antes del horario laboral, para tratar un tema que le pueda interesar, y cuando sepas que está allí… llámalo diciéndole que no vas a llegar porque , y no aparezcas hasta el momento que tengas OTRA reunión, dejando el tema aparcado sine die.
Brillante!!! Me río y me identifico a partes iguales.
29. Lee aténtamente su informe y modifica palabras por sinónimos, coméntale que la otra palabra no quiere decir exactamente eso (por ejemplo iniciar por comenzar). Tiempo después, vuelve a cambiar las palabras a la versión original, con el mismo argumento.
30. Pídele que reserve una sala de reunión, de 10 a 12; cuando llegue la hora dile que ahora vas. Aparece media hora antes de salir a la tarde para revisar todo el trabajo.
Yo te iba a proponer una, pero veo que puede ser un spin-off de la 12 que propones; En una reunión informal ante gente o conocidos ajenos al ramo, por ejemplo en la barra de un bar, habla en plural de lo bien que ‘nos’ fue aquella o esta decisión (consensuada), en cambio cuando algo ha salido mal, no lo digas públicamente, y si no eres muy mala persona, cada vez que te surja la oportunidad, échale en cara en privado el coste en tiempo y/o dinero y/o oportunidad y/o prestigio de la decisión (consensuada) ‘que tomamos’ por ‘su’ culpa… pero, mejor aún, si eres un capullo integral, coméntalo públicamente ante esos terceros con actitud paternalista. 😉
Acaso esto no es lo normal…???
Se me ocurre otra.
31. Llámale a gritos desde tu despacho (no vaya a ser que gastes el auricular del teléfono o ¡peor! la suela de tus zapatos), de forma repetida e incesante, es decir ‘Zulanito’ -1 segundo- ‘Zulanito’ -1 segundo- ‘Zulanito’ hasta que llegue, sin aliento y presa delpánico ante la urgencia. Entonces le dices que no te gusta el color de los ejes de las gráficas de la presentación, que pruebe a cambiarlo a verde.
32. Haz lo mismo siempre que veas que se marcha al baño. Espera 2 minutos para estar seguro de que le pillarás ocupado. Y mucho mejor si implicas a todo el departamento en su búsqueda ‘¿Pero dónde se ha metido Zulanito?’.
33. Proponle alguna tarea y preguntalé cuanto va a tardar, acto seguido preguntale si la puede recortar en dos días o horas si el plazo es muy corto y cuando acepte dile que tiene la mitad del tiempo.
34. Delante de un cliente proponle cosas imposibles y en plazos muy cortos y luego pideselo mil veces hasta que lo tenga, en la siguiente reunión con el cliente aparta ese tema.
Es buenísimo Raul, no se me ocurre que más añadir 😉 Pero lo pensaré, lo pensaré… jeje
¿33? Negocia una oferta con un proveedor durante dos meses consiguiendo una reducción del 20% sobre el presupuesto inicial haciendo concesiones ridículas por tu parte y, cuando llegue el día acordado para la firma, dile una vez sentados a la mesa con los documentos impresos que no puedes hacerlo si no rebaja un 10% adicional.
32. Descarta una idea/solución que haya propuesto él. Ni siquiera le des importancia, como si fuera una propuesta infantil. Al día siguiente ten tú «la misma idea», ponla en marcha con orgullo, y hazle ver a él y al resto que tú sí eres persona resolutiva.
33. Hazle jefe y/o responsable del trabajo de un enchufado tuyo.
Genial idea Raul, quizá no muy útil, pero genial.
Colocale reuniones a primera hora de la mañana (las 7 por ejemplo) y a ultima de la tarde (las 20 por ejemplo) en viernes y le llamas desde el bar para anularla.
Cuando se levante de su mesa colocale imagenes de mujeres que fuman como fondo de pantalla… luego puedes acusarle en voz alta de tal hecho.
HAz que presente el trabajo de otros como si fuera propio… luego acusale de trepas.
Dios cuanta maldad en estos comentarios
Qué jefes más malos vamos a ser todos, me encanta el post, muy bueno para desfogarse de los jefes
Estoy como en futurama, me rio y lloro a la vez. Esta triste/alegría realidad está presente en mi vida.
Además, creo que es útil saberlas para estar prevenido. Incluso, cuando terminéis la lista, propondría otra de como contrarrestar esta.
38. Dile que te acompañe a una reunión de seguimiento de un proyecto en el que no ha tenido nada que ver, y diez minutos antes de empezar dile que te ha surgido algo, que tú no puedes estar y déjale solo con el cliente / proveedor.
39. Si tenéis una reunión conjunta con un cliente acuerda con él A. A última hora de la tarde del día anterior habla en privado con vuestro jefe común para convencerle de B. En la reunión, delante del cliente, cuando él proponga A, tú le corriges para explicar que la postura de la compañía, confirmada por vuestro jefe, es B.
40. Puentéale hacia abajo: si es tu subordinado, habla con los suyos sin informarle a él y contradice todo lo que proponga.
41. El presupuesto evanescente: explícale que tiene un presupuesto X para hacer un proyecto, y dile que pida ofertas a proveedores. Cuando te traiga una propuesta negociada, dile que el proyecto se cancela por falta de presupuesto.
Gracias por vuestras aportaciones! No os preocupéis por los números, ya los pondré luego cuando revise la lista.
Añado algunas más:
– Cuando se vaya a casa a su hora, di en voz fuerte (para que te oiga todo el mundo»: «Joder, ¡cómo viven algunos!».
– A la hora de ascender a alguien, asciende al más inepto que puedas, y señálale como ejemplo a seguir.
– A la hora de revisar sus objetivos, si los ha cumplido, dile que «hombre, es que estos objetivos se conseguían prácticamente solos». Disminúyele el bonus en consecuencia.
– Fuérzale a que mienta al cliente prometiéndole plazos y compromisos que sabes que no se pueden cumplir. Cuando se produzca el incumplimiento, déjale a él que lo resuelva con el cliente.
– Grítale en tu despacho con las puertas abiertas, para que todo el mundo lo oiga. Un rato después, muéstrate amistoso y dile que si te acompaña a tomar un café o a comer.
– Critica a todos sus compañeros y dile que solo puedes confiar en él. Haz lo mismo con los demás, explicando a cada uno que él es el único que vale de todo el equipo.
– Haz reuniones interminables: empieza a las doce, y sigue hasta las tres, las cuatro… o por la tarde, sigue después de las siete, las ocho, las nueve… El secreto es no tener agenda, y revisar meticulosamente, hasta el último detalle, cualquier cuestión que se te ocurra en el momento. Critica despiadadamente al que se atreva a irse porque tiene un compromiso.
– Dile que es un trabajador muy valioso, muy competente y muy formado, y continuación asígnale trabajos intrascendentes, como pasar a limpio documentos o hacer fotocopias.
– Asígnale un listado de tareas, y cambiaselo cada semana. Un día tiene 8 tareas, la semana siguiente 19 pero 5 son las de la semana anterior, la siguiente 12 pero ahora tiene las que la semana pasada hacía un compañero…
– Hazle entrar y salir de un proyecto en función de cómo progrese: cuando todo va bien el proyecto lo llevas tú, pero si se retrasa o aparecen problemas le convocas a las reuniones y le asignas responsabilidades. Si se encauza dejas de convocarle y no le das más información, hasta que se tuerce otra vez y vuelve a ser responsable del retraso…
Lo triste es que todo esto lo he visto yo con mis propios ojos, no me invento nada…
Aquí puede ser el puteado el sujeto A o B. Mándale al sujeto A un trabajo que no compete a sus funciones, evidentemente no lo hará muy bien. Luego critícale por no haberlo hecho bien y pasáselo al sujeto B, quien se pregunta porqué no se lo dio desde el principio y dile que lo arregle (no que haga uno nuevo) que lo quieren para ya.
– Dile lo que quiere escuchar, ocúltale lo que tiene que saber.
– Cuando te saluda, respóndele «grrrr»; cuando no te salude dile «grrr».
– Coméntale a sus dos colegas más cercanos y con quienes te consta que mantienen buenas relaciones entre sí: «¿Sabes?, este reloj —muestra el reloj en tu muñeca— me lo ha regalado mi padre cuando yo tenía (15 años menos que hoy) años; nunca ha fallado, ¡nunca!. Hace unos minutos me ha preguntado «¿qué hora es?» y el cacharro ¡¡¡me ha dejado de funcionar!!!
Redúcele su salario un 20% de sopetón y sin avisar. LA razón: «Es por la crisis» y si no te lo crees, ahí está la puerta. (Es un caso real).
Esta entrada va a ser la más conocida de tu blog, y sino al tiempo…
Estáis haciendo un trabajo cojonudo, que «pechá» de reir 😀
Por cierto, si se «menea» la noticia llega a portada fijo, lo que no sé es si te haría mucha gracia…
En realidad ya se meneó anoche, quizás no fuera la mejor hora:
http://meneame.net/story/cien-formas-volver-loco-colaborador
Pero vamos, que si queréis votarla, sentiros libres 🙂
– Entérate a qué hora suele ir a comer (ej: 14:30). Una vez conocida la hora exacta, llámale siempre 5 minutos antes de esa hora, diciendo que vaya al despacho para contarle un asunto urgente, pero que se cuenta rápido. Una vez en el despacho hazle esperar, responde llamadas, habla parsimoniosamente y contando batallitas y anécdotas (totalmente innecesarias, por supuesto). Alarga eso que era breve a 40 minutos o una hora. Repítelo varios días. Haz lo mismo pero a la hora normal de salir de trabajar.
– Encuéntratelo en el comedor compartido, habla con él amistosamente para ganarte su confianza y sentarte a comer con él. Una vez sentado al lado, cambia el tono y ponte a hablar de trabajo toda la comida.
OTRA PERSONA:
– Pide un proyecto tecnológico complejo. Llegada una reunión de seguimiento, olvídate de que todo está funcionando bien o de plantear aspectos funcionales. Critica el color: que habías pedido color salmón y eso es un marrón, color de la caca. Cuando te diga que pone el color que tú quieras, casi de forma inmediata (se trataba de cambiar una variable), no le digas qué tono quieres exactamente.
Roasalia,
(31) Yo también tuve un jefe que llamaba a gritos. Lo más curioso es que usaba teléfono para hablar con una chica que tenía cerca y llamaba a gritos a otra chica que estaba muy lejos.
Además, solía modificar los nombres.
45 – Por el culo te la inco. Valida todos los formatos de pantalla que te presente, todas las interacciones… Cuando se acerque el final del proyecto, con el producto en testeo, dile que has pensado que es mejor (y si se grita INDISPENSABLE, mejor) hacer cambios a los formatos de pantalla. Asegúrate que los cambios que pides destrocen la aplicación.
Cuando el cliente se queje, ve dando las modificaciones de una en una, de forma que se tarden 3 semanas para ver que la aplicación vuelve al estado original.
– Dile que quieres contar con él para un proyecto con una nueva tecnología A que sabes que le gusta y que domina. Una vez convencido y cuando ha comenzado el proyecto, le dices que has pensado que es mejor hacerlo con otra tecnología alternativa B (que casualmente es la que tú dominas, aunque sea obsoleta). Pídele que organice unas clases para tí y otros compañeros sobre la tecnología A, mientras el trabajo lo debe hacer con la tecnología B. Dile que no dedique demasiadas horas a preparar las clases. Ignora lo que dice en las clases sobre las ventajas de esa tecnología A. Pasado un tiempo con la tecnología B dile que tiene un rendimiento muy bajo y cosas como «ya has visto que yo hago mucho más en el mismo tiempo». Cuando te responda que tú tardas menos porque dominas la B y que fue allí a trabajar con la A pon cara de no entender… y como que no recuerdas haber dicho nada de trabajar con A. Pasado un tiempo di que ya no quieres seguir con él.
Nota: basado en hechos reales… El experto en B, al final reorientó todos los desarrollos a la tecnología A (con 2 años de retraso).
* Reúne a todos los responsables de un determinado nivel para una supuesta reunión de seguimiento de proyectos, y dedícate exclusivamente a echarle la bronca a uno de ellos.
* Cuando te pregunte por las razones que recomiendan una decisión que has tomado, responde «porque soy el jefe»
* Aprueba las vacaciones que te pide sin rechistar, y luego hazle ver lo mal que ha hecho tomándoselas
* Cuando una persona entre en crisis nerviosa, en vez de pasarle al despacho y tranquilizarle, amenázale con informar a personal.
* Si ves que alguien de su equipo está muy liado, vete directamente a pedirle una pijada que lleve mucho tiempo, y luego recrimina al jefe intermedio que no esté hecho el trabajo inicialmente planificado.
* Si el código de vestimenta no está escrito, recrimínale su relajación, y mientras tú incúmplelo sistemáticamente.
* Vete con tres cañas encima a una reunión y discute acalorada y vehementemente.
* Delega completamente tus decisiones en una persona, y cuando el pringao las acate, hazle ver lo mal que ha hecho haciéndole caso.
Uf! Y no sigo que me encisco.
Recordando a todos los trabajadores que para dejar de estar disponible 24h hay que casarse y tener familia.
A los casados con familia, les recuerda que tienen una hipoteca, coche, mujer, e hijos que mantener.
Muy bueno Raul…y lo tengo muy reciente. En menos de un mes he pasado mas o menos por 1, 2, 3, 5, 7, 11, 14, 16, 19, 23 y 25…evidentemente ya estoy en la calle. 🙂
Juer, flipo, ¿de verdad hay gente que hace estas cosas conscientemente?, yo pensaba que era simple incompetencia…
¡Qué mundo este!
Enhorabuena y gracias por el post, Raul. El problema es que con la crisis esto se va a poner peor, pues como dijo Hernan Cortes a un soldado que se atrevio a quejarse de como repartia: «que no siguiese quien no quisiere, que al fin, las mujeres han parido y paren en Castilla soldados».
Mi aportación…
*Cuando veas que salga del baño entra tú inmediatamente y desde dentro grita quién se ha olvidado de tirar de la cadena.
*Enséñale tu nómina cuando hayas acumulado pagas.
*Di a tus empleados que no pueden pagar su alquiler que tu estás peor por que tu casa es mas grande y más cara. Casa, coche, vacaciones etc…
*[Arquitectura/Ingenieria] Cuando haya que imprimir planos no le dejes que es mucho gasto y que cuando presente el proyecto sea la primera vez que ve el proyecto en papel, seguro seguro que habrá multitud de errores.
*Cuando le pases cálculos no finalices las operaciones, déjalas sólo planteadas, lo duro ya esta hecho y el problema resuelto, sólo le queda cagarla con las cuentas.
*Modifica un asiento contable y apúntate cual y en cuanto… cuando lleve días loco buscando el descuadre aparece como ángel salvador y delante de todos resuelve diciendo «¿Y para esto tanto tiempo».
*Cuando te pase un trabajo con un error dile que te ha hecho perder toda la mañana aunque haya sido cuestión de minutos.
*Cuando utilice la impresora/fax/fotocopiadora úsala seguidamente, aparenta enojo y pregunta quién ha vuelto a atascar el papel ¡Siempre igual!.
*Pregúntale constantemente si te ha tocado el ordenador «por que no va igual».
*En tiempos lo hice :’-)… meterle un netbus, que es un troyando que permite controlar el ordenador de otros y puedes desactivarle teclas (las vocales mis favoritas), escribir por él (se hace cruces cuando lee «soy tonto» en medio del párrafo que acaba de escribir), abrirle el cd o incluso apagarle el ordenador en cualquier momento… también podías hacerle saltar alguna foto guarra cuando tuviera al jefe delante de su mesa… que tiempos xDDDDDD
Arghhh!! echo de menos el botón de suscribir a comentarios no me quiero perder ni uno!!!!!
¿o soy un cegato y no lo veo?
N+1 -> Envía al colaborador (preferentemente de sistemas) un mail para protestar porque no te funciona el correo electrónico… y que llegue. Cuando pasen varios días, indígnate por no haber sido atendido por sistemas.
Magnífico post, y complétamente de acuerdo; ahí va mi aportación:
– Dile que no se remuneran las horas extras porque «se supone que estás haciendo el trabajo que te gusta»
– Échale la culpa de que las cosas no vayan bien aunque su superior inmediato lleve de baja 10 meses por depresión.
– Achácale un bajón en el rendimiento aunque lleve dos años dándolo todo y no le pienses subir el sueldo.
– Culpa al Gobierno de su cambio en el bruto percibido en nómina sin mayor explicación.
X-D es verídico!
Gracias y un saludo
Sigo con los proveedores, que parece que el éxito de una empresa va a depender sólo de los empleados, cuando hay muchos autónomos y pymes navegando a sotavento de las empresas más grandes (en ocasiones a barlovento).
– Busca startups con productos innovadores para pedirles informaciones y demostraciones particularizadas y costosas de preparar. Al llegar al final del proceso de selección les cuentas que no han sido las escogidas porque sólo trabajas con proveedores de referencia y consolidados en el mercado.
– Contrata un proyecto llave en mano a partir de unas especificaciones y datos de partida que dices que vas a aportar. Arranca el proyecto, no entregues nada, pide al proveedor que haga propuestas e hipótesis, y luego le responsabilizas del consecuente incumplimiento de plazos y costes.
– Subcontrata los productos (bienes o servicios) de un tercero con un buen margen comercial y prima de riesgo al ir bajo tu marca y dirección. Luego le pides que trabaje directamente instalando en el cliente sin tu cobertura de gestión, le traspasas el riesgo de cobro y le cuentas que no vas a cumplir con los plazos establecidos porque no vas a pagar hasta que no hayas cobrado todo.
A mí sólo se me ocurren tres ideas.
1.- En lo profesional: Cambia las especificaciones de los proyectos día sí y día también.
2.- En lo profesional/personal: Convéncele de la necesidad de que esté siempre accesible, de que es importante que tenga siempre abierto el email y el teléfono móvil de empresa encendido, y (sólo por si acaso) que te dé el número del personal. Ofrécele una Blackberry último modelo para que tenga fácil acceso. Ofrécele un módem WiFi de empresa para el portátil. Y luego bombardea el email con vídeos de YouTube, y llámale siempre al personal fuera de las horas de trabajo.
3.- En lo personal: Ponle mote (cambia de mote a diario, es más abgrasivo) y llámale siempre por él, pero nunca a la cara, siempre a sus espaldas. En las discusiones de café, llévale la contraria siempre. Si es del Barça, hazte del Madrid. Si es seguidor de Alonso, dile que como Hamilton ninguno. Si se fue de vacaciones a Tailandia, dile que allí sólo van los pederastas. Bonus: si es mujer, saca a colación el tema de los hijos. Si no tiene, el tema de cuándo va a ser madre. Si no tiene ni novio, que a qué espera. Y si es lesbiana, que a qué espera para encargar una novia rusa por correo.
Yo creo que con eso es suficiente. El resto son derivados de lo anterior.
Sois todos un poquito chungos, ¿no?
GEEEEENTE!!!
GEEENTE!!
Magnífica compilación. 😀
Ya sabes la siguiente, ¿no? : cien maneras de hacer que tu Jefe te odie… O:-)
Tipo: «Cuando tu Jefe te diga que por favor termines algo importante antes de irte, dedica en su lugar todo el día a algo prioritario para tí, como por ejemplo engrasar la grapadora o pujar en e-Bay por esa guitarra tan chula que lleva siguiendo meses» O:-)
21 Imprime un trabajo que ha estado dirigiendo él y acusarte de no haberlo completado por lo tanto te lo puede hacer repetir hasta la saciedad y amenazarte de descontártelo del sueldo.
22 Acerte sentir culpable por no cojer siempre el telefono
23 No dejarte opcion a defenderte de sus acusaciones y minusvalorarte delante de otros empleados.
24 Llamarte amigo y cargándote todo el trabajo que debería hacer él
25 Preguntarte porque te ries cuando has oido un comentario gracioso como si no tuvieras derecho a reir.
26 Encargándote el trabajo cuando ya es hora de marcharse
27 Exigirte rapidez cuando la información la da a cuentagotas y no puedes completar nada
Genial!!! Lo cierto es que no había tenido jefes así hasta ahora:
51. Pidele que haga el informe final de un proyecto, ya que eres un especialista en ese tema. Cuando te pregunte dudas, contestaselas como si realmente fuera importante. Cuando lo tenga terminado, dejalo en el directorio comun, añadiendo su nombre, y al lado cuelga tu informe, el que se va a presentar, que no tiene nada que ver con el suyo…NADA.
52. Dile que tiene que participar en un proyecto superimportante, y reparte parte de las tareas con el y otros. Justo si es en semana santa, mejor. Cuando las vaya haciendo, dile que eso ya lo ha hecho tu protegido de turno….total que no haga nada. Lo mismo funciona, indicandole que tiene que asistir a una reunió crítica el martes de semana santa…y a la hora de la reunión te vas con tu protegido de turno y ni le mentas.
53. Asignale un proyecto. Cuando se tome un rato (por hastío, vacaciones, enfermedad o depresión…) pasale el proyecto a tu protegido de turno y ..cuando vuelva que tu protegido le diga que lo que estaba haciendo él no valía para nada, que lo han cambiado, y que ahora es cosa suya. No importa que tu protegido siga haciendo lo que el otro empezó, solo que deje de hacer cosas importantes porque un GP que tiene la fortuna de hablar de futbol y de tías buenas – al «castigado» no le gustan las tías, porque es una tía – es el que sabe hacerlas bien.
54. Dile que proyecte un complejo proyecto dandole dos o tres pautas y fijale una reunión de seguimiento. En esta reunión, profundiza y corrije el enfoque. Al rato pasa por ahí, y de paso le comentas mientras vas a por el coffe, que no hace falta que haga eso, que ya lo hará tu protegido (el GP que sabe de futbol y tias buenas).
55. Si te pregunta en alto, si es malo que se vaya de vacaciones en septiembre, contestale mas en alto, que no solo es no es malo, sino que le hace un favor al departamento.
56. Si te pide trabajo, proponle que te proponga cosas. Cuando lo haga, animale a que siga adelante. Cuando envíe el resultado, ni se te ocurra mirarlo….ni decirle que se lo mande a otros. Borralo del Disco Duro departamental cuando este bastante lleno.
57. Consigue que los mails que manda al mail departamental aparezcan siempre en negrita, como «no leidos». TODOS.
58. Pero eso si, siempre muy amable con el. Las putadas duelen cuando menos la espera……!!!
Esto aplica a cualquiera de tus colaboradores del que sabes a ciencia cierta que es mejor que tú…cuando no quieres dejar tu puesto.
sois todos unos cabrones malas personas
59. Dile lo qué hay que hacer en cada momento. Encomiéndale una tarea y que cuando acabe, te lo diga, para asignarle otra (como a quien no termina de aprender nunca su trabajo).
60. No hables con él de otra cosa que no sea trabajo (he hecho, he dejado de hacer, vamos a, tenemos que, estaría bien que, deberíamos, se me ocurre…).
61. Dile lo mismo siempre tres veces.
62. Enfádate si cada vez que le hablas no está a tu vera como un perro faldero. Y viceversa: si te presta toda su atención desatendiendo su trabajo.
¿Qué sois empresarios que no se aguantan ni a ellos mismos?
Yo tengo la mejor para defenderte del jefe,
recabar pruebas y después Inspección de Trabajo 🙂
cuando estas cosas pasan solo rie y rie y deja todo si bien es cierto el trabajo es necesario a los cabrones que hacen esto se les va a revertir, hasta con una sonrisa puedes tener el valor de matar todas estas intenciones.
63.- PONLE SOMNIFEROS EN EL CAFE Y KUANDO SE DUERMA RECLAMALE HASTA EL CANSANCIO QUE AL TRABAJAR NO SE DUERME 😉
64.- TIRATE DE PEDOS Y SIEMPRE HECHALE LA CULPA FRENTE A TODOS «ASI DE ERES UN APESTOSO» WEY
le pides que se quede a trabajar hasta tarde en la oficina lo dejas encerrado y le dejas las llaves para q abra y se valla , pero ho sorpresa le das unas llaves equivocas , y al dia siguiente lo ignoras , le dices q si le diste la correcta
Yo lo tengo chupado, llevamos un par de años que hemos visto practicar todas las formas de mobbing del mercado (con asesoría de mackinsey, está chupado):
¿qué tal llamarle secuestrador y chantajista en los medios de comunicación?
¿o hacer que por real decreto las horas que no quería hacer como extras pasen a ser ordinarias y obligatorias?
¿qué tal decir que le retiras «la gestión» porque lo vas a hacer tu y luego te dedicas a no gestionar nada y a reirte del desconcierto?
¿o elegir a los más incompetentes y peores compañeros para los puestos de responsabilidad subiéndoles el sueldo lo que se lo reduces a los demás?
¿qué tal decir que hay que cumplir los criterios de la Unión Europea para obligar a hacer cosas e incumplirlos constantemente desde la dirección?-denúnciame, mi abogado lo paga el estado…es una frase preciosa.
El summum ya es cerrar el espacio aéreo y abrirles expedientes por negarse a trabajar.
Bueno, no, hay otro summum más bonito, se les puede militarizar, se necesita al ejército, pero luego se les da una medallita por los servicios prestados y se quedan tan contentos…
No os aburro más… pensad siempre que a todo hay quien gane.
**Si tu empleada está embarazada de 7 meses, hazla ir de acá para allá todo el día, hasta que eche las bilis, y luego cuando ella se siente 2 minutos le dices… «¿pero es que estás cansada?». Claro está, los recaditos, sólo se los mandas a ella.
**Coge a tu mejor directiva y haz que venga desde el edificio de enfrente. Luego le haces esperar 10 minutos en tu puerta. Luego le sientas delante de ti 30 minutos mientras espera a que termines una llamada teléfonica con tu amigo del alma y cuando por fin le atiendes le dices… «¿Y yo para que te había hecho venir??? No me acuerdo. Bueno, vete a tu sitio, que si me acuerdo dentro de unos minutos te mando llamar otra vez».
** Lo mismo que antes pero, cuando por fin le atiendes, le dices «Tóma, llévale este papel al responsable de almacén». En vez de mandarle un email o llamar al almacenero para que recoja el mismo el papel.
** Delegas en tu hijo, Junior, proyectos importantes, y cuando el nene la caga tras 2 años al cargo, llamas a tu mejor empleado y le dices que le vas a hacer responsable de esos proyectos, pero que tienen que estar perfectamente reorientados y terminados en 4 meses.
** Le dices a tu empleado que tiene que cuando tiene que quedarse, ha de hacerlo, pero que es algo recíproco, que cuando necesito un día libre por cualquier causa, no habrá problema. Luego, cuando de verdad se coge ese día, se lo quitas de sus vacaciones.
** Se plantea hacer un edificio corporativo, le haces cargo del proyecto, y cuando hay que definir los puestos de trabajo y los departamentos y despachos para adaptar las instalaciones de A/A, datos, etc… le cambias los planos todos los días, pero le dices que tiene que estar hechas para el mes que viene.
** Tu empleado te ahorra el materias primas 90.000 € respecto del año anterior, incluso mejorando la calidad del producto final, y cuando expone sus resultados le dices «Bueno, ese dinero, por otro lado me lo gastaré».
Hay algo que no falla…Hazle pensar que depende de 2 jefes. Si ya uno te puede volver loco, 2 es la fórmula secreta para ello