Si hace unas semanas hablábamos de los milagros del powerpoint, varias experiencias recientes me llevan a reflexionar sobre uno de los aspectos, para mí, más necesarios para poder hacer una presentación efectiva: el hilo argumental.
He asistido en los últimos tiempos a algunas presentaciones que me han resultado embarulladas y un tanto caóticas, en las que se saltaban de unos temas a otros sin solución de continuidad y sin una relación clara, en las que te llegabas a preguntar en algún momento «¿y esto qué tiene que ver con lo anterior?» o «¿Y esto a qué viene ahora»?. Y al ir avanzando las piezas tampoco acababan de encajar. En algunos casos llega a dar la sensación de que el orador ha cogido trozos de diferentes presentaciones, las ha juntado y hala, a contarlas.
Para mí, una presentación requiere un guión claro, con una conclusión concreta que se quiera alcanzar («¿a dónde quieres ir a parar?») y un conjunto de argumentos que vayan guiando la atención del que la escucha hacia esa conclusión final. En fin, una estructura narrativa medianamente lógica y coherente.
Creo que es, muy por encima de colores, tipografías o fotos bonitas, la esencia de una buena presentación. Y es lo que intento trabajarme en primer lugar cuando me toca a mí preparar una.
Y me atrevería a decir que la prueba del nueve es sencilla: si en el último minuto de tu presentación puedes hacer una recapitulación lógica de todo tu discurso, en la que puedas demostrar cómo tus argumentos han ido fluyendo hacia la conclusión (al estilo de «hemos empezado viendo A, luego hemos visto cómo influye B y cómo, por lo tanto, llegamos a la conclusión C»), entonces lo has logrado. Si tú no consigues darle lógica a lo que cuentas… entonces imagínate cómo se quedarán los que te escuchan.
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Absolutamente de acuerdo. La falta de ese hilo conductor es lo que más me irrita de una mala presentación en powerpoint (o de lo que sea). Puedo perdonar exceso de figuras, exceso de letra, letra pequeña, …
Mi truco (si puede llamarse así) es siempre y previamente a abrir el ppt, esbozar un guión en papel (le llaman el «story board»), donde explico, con texto, el mensaje a transmitir y como se enlazan las transparencias. ¡Es el ABC de cualquier presentación!
A mi me llamó mucho la atención un plugin llamado pptPlex para Power Point, que permite dotar de una clara visión estructural a una presentación hecha con Power Point.
Me parece que para lo que planteas es una excelentealternativa. En este post puse un vídeo que demuestra sus posibilidades: http://ibelchi.com/blog/2008/08/17/pptplex-de-microsoft-office-labs/
¡Un saludo Raúl!
Y a mi que me siguen agradando los powerpoints de hace años jejeje más sencillos y directos sin alterar tanto la esencia del mensaje
Personalmente me encanta este blog de Sacha Chua explicando como planifica ella sus presentaciones, que tienen un estilo muy personal: http://sachachua.com/wp/2008/11/11/preparing-presentations-from-mindmap-to-storyboard/
Israel, la verdd es que la herramienta resultaba muy espectacular a la vista… pero me dejó frío; al final se ponía más énfasis en la herramienta que en el contenido. Mi ideal sería conseguir eso mismo que consigue la herramienta… pero sin que se notase 🙂
Ruisan, me gusta mucho la idea del link que pones: lo de imaginarse al tío que entra y al tío que quieres que salga de tu charla, y pensar qué les tienes que contar y cómo para conseguir esa transformación.
Al, a mí quieras que no los ppt’s antiguos se me hacen… «viejunos». Es verdad, si consiguen transmitir las ideas es lo importante, pero si además se consiguen hacer visualmente atractivos… pues doble puntuación. El problema es, claro, el que se deja llevar por los fuegos de artificio y se olvida de la esencia.