Llego vía Loogic a un post en el que se habla de la banalización de internet y en el que se dice que: «Hace algunos años era casi un lujo, una distinción, estar a la última. Ahora si no tienes uno casi serás la burla en tus reuniones de sociedad. ¡Todo el mundo tiene uno! Tener un blog ya no te distingue, es algo banal.»
Efectivamente, cada vez hay más gente con blog… pero… ¿eso es malo? ¿eso banaliza internet? ¡No, hombre, no! ¡Todo lo contrario! Que todo el mundo tenga un blog es la situación ideal, sería la culminación de eso que hemos dado en llamar la web 2.0. Que todo el mundo tuviese a su disposición una ventanita a través de la que comunicar al resto del mundo cuáles son sus experiencias, sus inquietudes, su visión del mundo. Gente normal que integra con facilidad los blogs en sus vidas sin ningún objetivo más grandilocuente que el de relacionarse y extender, de forma natural, su vida cotidiana. Ni más, ni menos.
Como he dicho en el comentario que le he dejado, otra cosa es que algún iluso pensase que era “alguien†por el hecho de tener un blog o que pensase que se iba a “forrar†con él… pero eso es un problema de sus expectativas, y una muestra de no haber entendido nada de nada de qué significa todo esto.
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Hola, Raúl.
En parte estoy de acuerdo, y como decía en mi último párrafo, no tiene que ser malo.
Sin embargo, creo que entendiste mal el post. No es la banalización de internet, sino la banalización EN internet.
La banalización no es algo malo, igual que tampoco es malo que alguien se compre un Audi, o que se vaya de vacaciones al Caribe (por usar los ejemplos que utilicé). Simplemente es una extensión de un grupo reducido y selecto a una generalización de la población. Y eso es algo que ha sucedido. Yo no he dicho que eso sea malo.
Quizás te entendí mal, aunque «banalización» para mí siempre tiene un matiz negativo/despectivo. Creo que considerar como «selecto» al grupo que llegó primero a los blogs incide en esa idea.
Al final, parece que tener blog «molaba» cuando sólo era cuestión de unos pocos, y «deja de molar» cuando es cuestión de muchos. Y mi planteamiento es que tener blog «mola» independientemente de si lo tienen muchos o pocos. Tener un blog no lo considero un elemento de distinción ni algo de lo que merezca la pena presumir, ya que es meramente un elemento de comunicación.
Encima, frente a otros ejemplos, un blog ni siquiera tiene las implicaciones técnicas («tener un blog es ser selecto porque sólo si sabes mucho de tecnología puedes tenerlo») o económicas («tener un blog es símbolo de status porque sólo si tienes dinero puedes tenerlo») como para marcar diferencias.
Dentro de poco (espero) considerarse «especial» por tener un blog nos parecerá tan absurdo como considerarse «especial» por tener móvil (aunque hay gente que se considera «especial» por tener un iPhone que ni siquiera pueden usar… pero esa es otra historia 🙂 )
En un comentario de la entrada de mi blog explico un poco más (y hago mención a esa consideración negativa de la banalización). Lo siento, estaba contestando allí, tengo que repartirme 🙂
Resumiendo decía que banalizar no es negativo -se considera como tal porque se suele usar cuando son marcas de lujo que pueden destruir su mayor activo, la diferenciación-, de hecho muchas veces es algo buscado (pongo el ejemplo representativo de los coches y Henry Ford).
Precisamente en la banalización está la base de una de las estrategias de precios más usadas: la del «descreme».
Por cierto, tu último párrafo me parece que va en la línea de lo que quería expresar (con respecto a los blogs). No sé si interpretarlo como un guiño (el ejemplo del móvil, buenísimo… y va en la línea de mi post, también).
Yo tengo dos blogs, a ver si le estoy dejando sin el suyo a alguien 🙁
En mi opinión hay dos problemas que va en detrimento de la comunidad y la banalización de que se habla puede ser responsabilidad de todos los que publicamos en las bitácoras.
1. La falta de valor añadido en los contenidos
Jakob Nielsen, el gurú de la usabilidad, recomienda a sus clientes que inviertan tiempo en escribir artículos en su bitácora o blog y no se limiten a publicar con el único objetivo de generar comentarios y tráfico. De lo que se trata es de generar valor añadido. Creo que es algo que está pasando en la blogosfera.
Cuando se publican artículos cortos, casi telegráficos, sobre un tema determinado se está haciendo lo mismo que miles o cientos de miles de otros blogs. El valor añadido que puede generar ese artículo corto al lector es inexistente mientras que el daño a la bitácora–sea personal o corporativa–puede ser grande. Y dice, Nielsen, muchas bitácoras están aumentando la “polución informativa†en la red.
Nielsen habla de que el valor de la información y los contenido en la web no goza de proporcionalidad: un artículo en el que se ha invertido, pongamos por caso, cuatro veces más tiempo que otro corto generará más del cuádruple de valor en el lector.
2. La no-conversación
Una de las características que más llama la atención últimamente para el que lleva algún tiempo metido en este mundo es la gran cantidad de los artículos publicados en las bitácoras de la comunidad castellana en los que nadie conversa y el redactor tampoco reflexiona. Los textos parecen no están preparados para generar comentarios, son simplemente una reseña de lo que leen en otros blogs.
Por lo demás, un abrazo para los que analizan, reflexionan y conversan en este espléndido blog.
Estoy de acuerdo en que estas actitudes está haciendo mucho daño a la comunidad bloggera. La blogosfera, tras el impresionante número de bitácoras que salen a la luz permanentemente, necesita una pausa para estudiar qué es lo que están haciendo.
Me gusta la expresión «Gente normal que integra con facilidad los blogs en sus vidas sin ningún objetivo más grandilocuente que el de relacionarse y extender, de forma natural, su vida cotidiana. Ni más, ni menos.» porque es más o menos como me lo tomo yo. Mientras me venga bien el blog y tenga ganas para comunicarme con gente lo mantendré, pero casi más que eso me gusta bucear en montones de blogs ajenos. Hay de todo.
Roberto, está claro entonces.
Cada vez que Yabu abre un blog, un ciudadano se queda sin el suyo… 🙂
Amalgamadeletras(todojunto):no estoy del todo de acuerdo con Nielsen. Al final, eso de la «polución informativa» es una ficción. Como ya expresé en alguna ocasión, cada uno construye SU blogosfera. Si hay un blog que considero que no ME aporta (y el «me» es importante:lo que me aporta valor a mí no tiene que ser lo que le aporte valor a otro… y viceversa) simplemente NO LO LEO. Como si no existiera para mí. Yo soy el responsable de hacer que MI blogosfera me aporte valor.
Llevado a la vida real, es como si conoces a un tío pesado que no dice más que tonterías sin sentido: lo más probable es que no le llames para quedar. Sin embargo, si conoces a alguien interesante cuya conversación te llena, posiblemente procures frecuentarlo.
Y sí, el gilipollas se puede poner en medio del parque gritando, y como resultado le «oirá» mucha gente. Pero escuchar, lo que se dice escuchar… se escucha al otro.
León, esa es mi idea también. Igual que en la vida real, hay quien es más «de hablar» y más de «escuchar». Y en los blogs lo mismo, los hay más «activos» y los hay más «pasivos». Pero conversan igualmente.
Claro, muy argumentado tu punto. La cuestión es cómo utlizar la herramienta. Más me gusta que la gente, común y corriente pueda finalmente con un blog, aportar a muchas cosas en este mundo: claro, eso lo menciono en seguir o enriquecer la conversación de miles de formas. No realizar como dice una amiga que copia y pega. Con esto, las relaciones se estancan, no generan fluidez. En internet ya la tangente es reflexionar, enriquecer o dar un nuevo tema del qué conversar.
Con tanto blog, quizá haya que conformarse con que cada blog tenga una persona detrás, ¿no?
Dependiendo en que circulo social te muevas, todos los de a tu alrededor pueden tener un blog, en el que yo me muevo no conozco a nadie que lo tenga, es más me ven a mi como un “bicho raro†. Me suelen decir, ¿y cuánto dinero ganas? Nada, ¿qué pasa, sólo hay que pensar en sacar beneficio de todo en esta vida? Yo creo que influye a que te dediques el tener un blog, independientemente si lo quieres hacer temático o personal. Yo entiendo por un blog, compartir con alguien tus mismos gustos, sean del tipo que sean, porque siempre habrá alguien al que le ayuden tus palabras o viceversa. Y sobre todas las cosas hacer amigos…
Veo, por lo que crece tu pie de página, que en tu caso no es «un hombre, un blog» si no
«un hombre, una red de blogs»
Como diría el labriego del anuncio del todoterreno: ¿Y Julio?¿Qué opina de esto?
😉
Te sigo desde hace bastante aunque nunca he participado. Personalmente me gusta que esté todo en el mismo blog, me gusta ver la persona que hay detrás del profesional, para mi es importante que un buen profesional sea también buena persona, aunque gane menos dinero (y no estoy diciendo que el dinero no sea importante)
Pero yo, ni te voy a contratar ahora, ni creo que lo pueda hacer nunca, asi que toma el post como un comentario culaquiera que te hacen por la calle, sin mas importancia.
Saludos