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Un proyecto de 20 años

Vaya por delante: yo soy del Atleti. O sea, que los Barça-Madrid (como el disputado ayer) los vivo un poco desde fuera, como los vive alguien a quien le gusta el fútbol pero sin la pasión desmedida del fororo. Sin embargo, tengo que reconocer que en los últimos tiempos siento cada vez mayor simpatía por el F.C.Barcelona, en contraposición a una creciente antipatía por el Real Madrid. Y no se debe a un presunto «antimadridismo» propio de un colchonero (cualquiera que me conozca sabe que a mí eso de definirme como «anti» nada es algo que no me va; estar a favor de algo no tiene por qué ir vinculado a estar en contra de quien piense lo contrario). Simplemente: me gusta más su estilo, tanto dentro como fuera del campo. Destila eso que se llama «seny», una cualidad que me gusta.
Después del partido de ayer, que terminó con un rotundo 5-0 a favor de los blaugranas, estuve escuchando un rato de la conferencia de prensa de Guardiola. Hay gente que no le traga, que dice que es todo pose. Pero a mí me gusta lo que dice, y cómo lo dice. El fondo, y la forma.
El caso es que, entre todas las cosas que dijo, hubo una que me gustó especialmente. En un momento de triunfo, que otros no hubieran dudado en reclamar para sí mismos, Guardiola expuso con gran naturalidad el carácter colectivo del mismo. Haciendo énfasis, especialmente, en la dimensión temporal. El Barça de hoy es lo que es, porque hace 20 años alguien definió cómo quería que fuera el futuro, qué estilo (tanto dentro como fuera del terreno de juego) quería asociar al club. Y desde entonces todos (presidentes, directivos, entrenadores, técnicos, jugadores, ojeadores, cantera…) han trabajado sobre esa «hoja de ruta» de forma constante. Por supuesto, en 20 años ha habido altos y bajos. Pero la brújula siempre ha apuntado al mismo norte, y eso ha ayudado a tomar decisiones.
Así, el hoy entrenador fue un joven jugador que hace 20 años empezó a mamar esa idea de club. El hoy buque insignia del equipo, Xavi, hace 20 años era un chavalín que fue seleccionado, educado… en esa idea, y además teniendo como ejemplo a sus mayores con los que compartió vestuario. Los que hoy empiezan a llamar a las puertas del primer equipo hace 20 años no habían nacido. El único Barça que han conocido ha sido éste. Igual que Xavi, pero 10 años después, han sido seleccionados y criados bajo el mismo esquema, y con los mismos ejemplos. Dentro de 10 años seguramente Thiago o Messi afrontarán el ocaso de sus carreras, habrá otros (que ahora tendrán 10 años) tomando el relevo, y habrá otros (los que están naciendo ahora) que empezarán a alimentar la cantera.
Una idea, germinando durante 20 años.
No pude por menos, mientras escuchaba a Guardiola, que pensar en España como país. Inmersos en una crisis de caballo, respecto a la que ya dije hace tiempo (va para dos años) que era enormemente pesimista. Vemos como los políticos se dan por satisfechos (¡manda narices!) con aplicar parches cortoplacistas («a ver si hay suerte»), echar la culpa a los de afuera, cuando no directamente se lavan las manos. Eso los que gobiernan, mientras los otros se frotan las manos esperando a ver cómo caen los rivales como fruta madura para así subirse a la poltrona sin aportar nada valioso. Y, con este panorama, aún se quejan de que «no hay confianza en España». ¿Pero qué confianza va a haber? ¿Alguien ha dicho, se ha parado a pensar si quiera, qué idea de España quieren poner en marcha, qué proyecto de país queremos para dentro de 30 años, qué «hoja de ruta» vamos a seguir, a dónde va a apuntar nuestra brújula? Sin eso… ¿qué medidas se van a tomar? Pues las que estamos viendo: reformas superficiales, hechas deprisa y corriendo, un día en un sentido y al día siguiente en sentido contrario… de las que encima se esperan resultados milagrosos. Vamos dando palos de ciego. Así, ¿qué confianza vamos a generar?
Un proyecto de país. Una idea que poner a germinar. La conciencia de que el corto plazo probablemente no tiene arreglo, que los esfuerzos que hagamos ahora empezarán a dar sus frutos dentro de unos años. Pero si al menos somos capaces de transmitir, tanto al exterior como a nosotros mismos, que tenemos un plan, una estrategia, que sabemos a dónde vamos… empezaremos a dar pasos sensatos, coordinados, orientados. Y la confianza empezará a fluir.

13 comentarios en “Un proyecto de 20 años”

  1. Totalmente de acuerdo. Es como el último puzzle de Layton y el futuro perdido que he resuelto. Después de mover las fichas durante un rato para aquí y para allá, me he puesto a pensar dónde tenía que ir cada una y luego ha sido muy fácil hacer los movimientos para colocarlas. Si no te paras y piensas, sólo mueves fichas de un lado para otro sin resolver nada.

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  2. Raúl,
    Cierto es que el Barca pasa por un momento muy dulce y que Guardiola, una persona inteligente, está dándole justo la orientación que necesita para liderar un proyecto que está calando en la sociedad (dejando a un lado gustos y sentimientos), debido a varios factores, entre los que cuenta con chavales aparentemente educados, obedientes y que caen bien porque son poca cosa y no tienen pinta de hacer daño a nadie.
    Todo esto es cierto, pero hasta que llegó Guardiola, el Barcelona no era más que un club (con sus títulos), endeudado y en busca de soluciones a corto plazo, y que por cierto su primer plato no era Guardiola, pero que el escaso dinero le hizo dar una oportunidad a una persona en la que la mayoría no creía.
    A partir de aquí creo que todo ha venido redado gracias a una generación maravillosa de jugadores y sobre todo personas.
    Con todo esto quiero dar mi punto de vista sobre dos aspectos:
    1. Un país debe tener un plan de futuro de verdad, y a largo plazo, cosa que hoy por hoy es difícil, porque la sociedad española no es constante, no encaja en este tipo de proyectos comunes y serios, no aceptaría el cambiar la juerga por nada que no se vea rápidamente reflejado en su economía de forma positiva y esto solo podría llegar a pasar con un golpe de suerte como le ha pasado al Barcelona en la creación de su proyecto actual, y eso creo que hablando de economía es difícil.
    2. Soy del Madrid, pero como tú comentas no me gustan los comportamientos extremos, ni los anti, y si me gusta hablar de fútbol sin discusiones, sin eso que en los bares llaman la salsa del fútbol (nunca he entendido una escusa tan barata para poder insultar a tu cuñado, amigo, o enemigo sin que se enfade) y creo que esta vez Guardiola y sus chavales (porque ayer parecían hijos defendiendo a un padre agredido por un extraño) no tuvieron ese comportamiento de caballerosidad que parece tienen, porque claro se presupone que Cristiano (calificado como chulo, y demás …) no puede estar a la altura o Mou, pero Guardiola debe estar siempre a la altura y no hacer lo que hizo con Ronaldo, eso no es de caballeros y el fútbol no vale de escusa.
    En general las corrientes son muy poderosas y la corriente hoy en día está a favor de Guardiola, pero ¿qué pasará cuando esa corriente ya no tire a su favor? ¿Seguirá siendo el caballero que es o le pasará lo que a Mou, Quique Flores, Ramos y demás?
    Mi conclusión es que me gusta el fondo de tu artículo, porque es una buena teoría para la grandeza a medio o largo plazo y para cambiar de verdad una sociedad que necesita cambiar mucho, pero no creo que el fútbol que es un mundo rodeado de ciclos cumpla esta teoría.
    PD. Un gran artículo rodeado de comentarios con mucho sentido común como suele ser habitual.

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  3. Hola.
    Me hace gracia, como denominador común de cierto sector contrario a Guardiola, que usan continuamente estos días un «Y si», pero especialmente el «y si las cosas le van mal a Guardiola, cómo va a actuar?».
    Miren, primero tengan un plan, luego ejecútenlo, y cuando les salga tan bien como está jugando el Barcelona hablaremos, hablar por hablar sin hacer nada es lo mismo que la prensa deportiva hablando de Canguelos que año tras año se han visto inexistentes.
    Ayer estaba viendo la rueda de prensa en directo y me emocioné un poco, lo acabé destacando en mi blog: http://juanandres.milleiro.com/humildad/
    En fin, cada vez me da más reparo alabar a Guardiola porque ya me llaman talibán… mira este artículo de El Mundo Deportivo : http://juanandres.milleiro.com/guardiola-president/

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  4. Moisés, sin ánimo de convertir esto en un post sobre fútbol (que no era más que una excusa para meter lo otro); por un lado, Xavi, Pujol, Valdés, Messi… ya estaban en el Barça antes de que Guardiola fuera entrenador (algunos estaban incluso cuando era jugador). Los chavales que hoy empiezan a saltar al primer equipo ya estaban en la cantera antes que Guardiola. La Champions de 2006 no la ganó Guardiola… en fin, creo que hay un hilo conductor en estos 20 años que va más allá de Guardiola, y eso es lo que él puso de manifiesto. Algún día su ciclo acabará, como acaban todos. Pero si no se pierden los nervios (sería un suicidio), vendrá otro que seguirá por una senda similar.
    Por cierto, en esa generación maravillosa de futbolistas y personas… ¿no tiene nada que ver ese proceso iniciado hace 20 años? A eso me refiero.

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  5. Yo si que no entiendo de futbol, entre otras razones porque jamás he visto un partido completo ni en directo ni en la tele. Eso no me impide ser bombardeado mediaticamente de forma permanente, con lo que se llega a tener un criterio -lego, pero criterio al fin y al cabo-. No acabo de entender cómo el Real Madrid, que invierte tanto o más que el Barcelona en crear su propia cantera, no la utiliza en su primer equipo prefiriendo unos superfichajes que cuesta justificar y que acaban siendo efímeros.
    De la política no soy capaz ni de tener criterio. No existe empresa – ni proyecto – que pueda sostenerse con decisiones exclusivamente cortoplacistas que buscan la anulación del contrario y la supervivencia en el mando. Que yo sepa, las grandes empresas (salvo el Real Madrid)no hacen «fichajes estrellas» de sus principales dirigentes basadas en su «carisma» o en su capacidad de «liarla parda con la competencia». La veteranía y la experiencia suelen ser factores muy apreciados. Exactamente al contrario de lo que ocurre en la política.

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  6. A mi el futbol ni me interesa ni me preocupa. Lo que si te digo es que el post es genial. Me parece que el planteamiento que haces es impecable y deberíamos ponerlo en el corcho para tenerlo en cuenta en lo profesional y lo personal.

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  7. Por eso los jugadores que ya no juegan con Mou, en 3 equipos diferentes a los que ha hecho Campeones de Europa, le adoran. Y a Pep, los que ya no juegan con él, no le pueden ni ver.
    Pep está sobrevalorado. ¿La demostración? Esos mismos jugadores han hecho campeona del mundo a España jugando con otro entrenador y con unos pocos jugadores más.
    No vayáis tan de guay con Pep… todo lo que ficha es basura o lo tiene que echar porque no lo soporta (Chigrinski, Ibrahimovic,…). Cuando entrene a otros equipos, veremos su talla. El buen líder lo demuestra con varios equipos. Con killers yo soy un jodido Yoda, no te jode.

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  8. Un post excelente.
    No puedo estar más de acuerdo contigo (incluso en lo de ser sufridor = atletista).
    ¡Qué importante es marcar un objetivo claro y que todo se alinee hacia la consecución del mismo! Esta idea se puede aplicar, como bien dices en tu entrada, al fútbol, a los negocios, al trabajo, a la vida personal, al gobierno de una nación o a cualquier cosa.
    En esta sociedad tan cortoplacista en la que nos ha tocado vivir, no estaría de más levantar de vez en cuando la vista y mirar un poco más allá para poder fijar cuál será la meta hacia la que dirigirnos.
    He descubierto el blog por casualidad (san google) y ya está añadido a los favoritos.

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  9. Has dado en el clavo de lo que parece ser el asunto más descorazonador de «la crisis», que el carácter cíclico que muchos atribuyen a las crisis les hace pensar que solo hay que esperar al automático cambio de tendencia, cuando lo que sucede es que como bien dices no hay proyecto a largo plazo que permita un lugar a la esperanza.

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