Me he quedado de piedra.
Resulta que hace unas semanas me llaman de una compa��a, vinculada a una tarjeta de cr�dito, para ofrecerme un seguro de vida. Como no ten�a, y las condiciones me parecieron razonables, dije que si, y ya de paso que incluyesen a mi c�nyuge.
Al cabo de las semanas llega una �nica p�liza, la de mi mujer, con alg�n dato err�neo. Llamo al n�mero de Atenci�n al Cliente («en el que estaremos encantado de atenderle», seg�n indican en la carta) para solventar ese dato y, de paso, para interesarme por mi p�liza (que me extra�a que no llegue). Me dicen que la m�a est� retenida porque alguno de los datos del cuestionario de salud han hecho que pase a otro departamento, donde valorar�n la oportunidad de pedir m�s datos y dem�s.
Ante esto, le digo que por favor retenga la p�liza de mi mujer hasta que no est� la m�a, porque si la m�a no me la mandan no vamos a firmar ninguna. La respuesta ha sido «Ese tipo de amenazas sobra». Y a partir de ah� me ha explicado, con tono airado, que cada p�liza es individual, que no se pueden vincular de ninguna manera, y no s� qu� m�s.
A cuadros me he quedado. No me cabe en la cabeza que cuando llama un cliente y pide las cosas con educaci�n y buenas maneras, le respondan as�. Ahora, me hacen dudar de si merece la pena trabajar con ellos o, directamente, no.
Recomendaba Martinez hace tiempo que «No conviene aparecer de protagonista de lo que se cuenta, ni promover causas personales que no tengan m�ritos intr�nsecos, ni cruzadas contra la empresa que nos arregl� mal la lavadora». Pero es que hay cosas que le ponen a uno de muy mala uva, y por alg�n sitio hay que reventar.
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C�mo debe ser el trabajo de esta mujer para que no sepa identificar cuando alguien le est� hablando con educaci�n y se sienta atacada por todo. Seguro que est� ‘Muy satisfecha’ con su trabajo.
Cada vez que me llaman y digo no a una oferta de telemarketing percibo malos modos.
La verdad es que pueden llegar a ser bastante plastas, y llega un momento en que no te los puedes quitar de encima sin ser brusco tirando a borde