Me llamo Raúl y me gusta compartir ideas, reflexiones y herramientas para tener una vida más sencilla, equilibrada y significativa. Cientos de personas ya se han suscrito a mi newsletter semanal gratuita. Más información, aquí


Hablar de la competencia

Digamos competencia, digamos gente del mismo sector, digamos gente del mismo mundillo… pero al final, cuando uno es un actor implicado en un mercado, hablar de otros actores implicados en el mismo es complicado, «sensible». De forma más o menos evidente, se pueden mezclar las opiniones razonables y sensatas con las «agendas ocultas» y los intereses creados. Y aunque uno procure maximizar todo lo posible el peso de lo primero y reducir a su mínima exprexión lo segundo, siempre habrá alguien que pueda interpretar lo que uno dice en términos equivocados y acusarte de lo que no es en calidad de «parte implicada».
Algo así me pasa cuando siento que tengo algo que decir en público respecto a temas relacionados con Weblogs SL. No tanto respecto a WSL sino al sector o mundillo. Sucedió cuando la tan traída y llevada fusión de Medios y Redes (o, para ser más exactos, con todo el chafardeo previo de «alguien me ha dicho que algo va a pasar…»). O me sucede hoy un poco al hilo de la presentación de Negocios Beta por parte de Hipertextual. Siento que hay cosas que me gustaría decir al respecto, y estoy seguro de que conseguiría aislar en gran medida el factor «agenda oculta» al dar mi opinión.
Pero tengo la sensación de que, indefectiblemente, alguien llegaría y trataría de buscarle tres pies al gato por el hecho de yo estar con WSL. Y empezaría a ver fantasmas donde no los hay. Y acabaría, a buen seguro, generando algún malentendido y ganándome alguna antipatía inmerecida con gente con la que probablemente no haya razón ninguna para enfrentarme.
Y uno pone en la balanza coste y beneficio potencial… y piensa «total, ¿qué gano yo metiéndome en esos charcos?. Cada cual a lo suyo». Pero no deja de ser una lástima no poder expresarse con naturalidad.
Aunque supongo que esto no es muy distinto de lo que sucede en el ámbito familiar o de amistades, donde a veces «te tienes que callar» porque puedes fastidiarla, o en el ámbito profesional donde, por ejemplo, no te metes en determinados «fregaos» con compañeros de oficina con los que tienes que lidiar al día siguiente. Coñe, si como dice Varsavsky, al final el mundo digital no deja de ser exactamente igual (con sus virtudes y sus defectos) que el mundo real.

9 comentarios en “Hablar de la competencia”

  1. Uffffffff….que no, que no…
    Que el mundo digital no es igual que el real. En el real me da la sensación que se guardan mucho mas las formas. El anonimato(o la creencia en el anonimato) saca lo mñas animal de nosotros mismos…
    No recuerdo quien decia aquello de que «si Dios no existiese, todo nos estaria permitido».
    Por lo demás, criticar a la competencia no me parece mal. Denigrarla si. Es malo para tu propio negocio. Es mejor dar a los demas elementos de juicio para que, usándolos, sean ellos mismos los que la denigren…

    Responder
  2. Mmmm… yo sigo diciendo que desde el anonimato puro sí que se puede ser bruto, pero desde el seudónimo algo menos… porque sea con el nombre real o con el inventado, te acabas encontrando a la gente otra vez por ahí.
    Obviamente, yo no hablo de «denigrar», sino de opinar. Ahora, el mero hecho de dar esos «elementos de juicio» (incluso aunque hablemos de datos objetivos) puede ser cuestionado: ¿por qué esos elementos? ¿por qué en un momento determinado y no en otro? ¿qué oscuras intenciones se ocultan tras ese movimiento?
    Incluso si hablas en tono positivo, alguien puede pensar si no estarás siendo irónico.
    De hecho, estoy casi seguro de que este post (y mira que lo he escrito cogiéndomela con papel de fumar) podría llegar a ser malentendido si alguien se pone a ello.

    Responder
  3. Dejar de ser anónimo es lo que tiene, problemas y más problemas como este.
    Desde mi punto de vista, no dejas de pensar lo que piensas por estar trabajando en un sitio u otro. Es el lector que lo interpreta de otra manera por muchos disclaimers que se pongan.
    No es culpa tuya, es culpa nuestra. Ahora que estamos avisados… qué tenías que decir?

    Responder
  4. A mí me ha sucedido alguna vez en mi blog, en alguna ocasión en temas de blogs, y reconozco que por mi inexperiencia (creo que es de inexpertos buscarse líos donde no debería haberlos), y en temas más de universidad-facultad, prefiero no decir nada hasta terminar la carrera. Podría decir muchas cosas de muchos aspectos de mi vida que no digo en el blog, básicamente por no buscarme problemas, pues mi blog poco anónimo es.
    Un saludo, «ex-jefe»

    Responder
  5. ¿Y por qué no? no se supone que para eso están los blogs y si una empresa tradicional no encaja las críticas se la defenestra. Qué curiosa hipocresía (la de la blogosfera) en la que nos podemos meter (creo que aún no hemos llegado de pleno) que si te metes con una empresa de videojuegos (y sabes por donde voy) eres un héroe de la libertad y si tú mismo te metes con una empresa de blogs eres un ruin… y estoy de acuerdo ocurriría. Bueno vale es porque son competencia, pero con naturalidad y razones por qué no opinar… de hecho los implicados en la industria los que más podéis hablar.
    Bueno y es lógico que os analicéis unos a otros, todos lo estamos haciendo y buscando huecos para entrar en el negocio, de ahí la explosión de redes. Posicionarse como alguien que habla objetivamente no estaría mal… pero me da que tienes razón acabaría en polémica.
    Sin duda un tema complicado, probablemente yo tampoco me metería en líos, pero es una pena, la solución un blog de «blogger anónimo» son los problemas de perder el anonimato… y lo digo en serio mira como pabloguero y demás nos dan caña con humor encima.

    Responder
  6. Wilhelm, yo creo que la cuestión es balancear, como decía yo antes equilibrar coste-beneficio. En el caso que mencionas, el coste potencial es que la empresa en cuestión no te vuelva a hablar, pero el beneficio potencial es marcar una línea de lo que nosotros hacemos y lo que no. Beneficio > Coste… pues se hace. Pero en casos como este donde coste > beneficio (el beneficio es que yo doy mi opinión, pero poco más, y el coste potencial es a que te tachen de qué se yo), igual es mejor envainársela.
    Lo del «blogger anónimo» sí… pero no. Insisto, si eres un «Borjamari» al final puedes tener ahí tu puntito… pero defendiendo a capa y espada ese anonimato, que además es incompatible con decir «éste soy yo y tengo cierta ‘autoridad’ para opinar».
    No sé, creo que como bien dice Andrés hay determinados aspectos en los que hay que andarse con ojo. Y no por hipocresía (que no creo que sea mayor que la que hay en la vida real) sino por casi sentido común, nadie tira piedras contra su tejado.
    Julen, sí.. pero tampoco. Seguro que tú tampoco le dices las verdades del barquero a tus clientes (aunque te quedes con ganas) sino que en el mejor de los casos harás mutis por el foro y en el peor tragarás con ellos. O tampoco hablarás mal de algún competidor que te encuentres, aunque tengas motivos.

    Responder
  7. Complicado no hay duda… y es cierto que desde el anonimato no se puede esgrimir autoridad, quizás sí tenerla hasta cierto punto pero no ejercitarla públicamente claro… bueno tú de eso tienes que saber.
    Y aquí el coste puede ser alto, sobre todo porque me parece que hay «buen rollo» entre las distintas redes de blogs y un lío así podía hacer que se perdiera, pero un poco de autocrítica al sector tampoco vendría mal. Vamos que nos quedamos con las ganas de saber qué opinas sobre esos asuntos, a ver si algún día en la «intimidad» de los eventos te sacamos algo.

    Responder

Responder a Wilhelm Lappe Cancelar la respuesta