Cuando allá por 1996 el Atlético consiguió su «doblete» se produjo, probablemente, mi pico de pasión por el fútbol. Mis amigos del Colegio Mayor seguramente todavía me recuerdan encogido en el sofá («mi» sofá) de la sala temiendo cualquier desgracia, arrancándome pelos de la patilla o gritando goles desencajado por la ventana.
Pero eso fue hace mucho tiempo, y el fútbol apenas me interesa ya.
Pero claro, llega un Mundial y no te puedes abstraer del todo. Hasta me vi el partido de España contra Marruecos. El que supuso la eliminación de España en los penalties.
Aunque, la verdad, la eliminación se produjo bastante antes.
Es muy interesante el concepto de «one-trick pony», o «caballito de un solo truco». Según la definición del diccionario de Oxford, es «aquel que solo es bueno haciendo una cosa o trabajando en un área determinada».
España jugaba a una cosa, y una sola. Si enfrente se pone Costa Rica… ¡les metemos 7! Si enfrente se pone Marruecos… no somos capaces de hacer un gol. Si Japón nos remonta, no somos capaces de arreglar el partido.
Los mismos jugadores, haciendo lo mismo… aunque era evidente que no funcionaba.
One-trick ponys con camiseta roja (o azul).
Nadie puede negar los beneficios de hacer una cosa bien. Lo malo es que dependes de que el contexto se alinee para que eso que haces bien te funcione. Porque si el contexto cambia, y tú no tienes la capacidad de adaptarte… acabas eliminado.
Porque no todos los días son Costa Rica.
Hay que cultivar la versatilidad, la habilidad para reconocer cuándo tu receta no funciona y para aplicar soluciones distintas a contextos distintos. Vivir con «mentalidad de crecimiento» para entender que siempre puedes evolucionar y añadir nuevas herramientas a tu bolsa de trucos.
Porque cada herramienta que añades es una situación distinta más en la que puedes sobrevivir.
No vale decir eso de «yo es que soy así, y con esta idea muero».
Porque efectivamente, con esa idea mueres.
PD.- Esta idea de que «cuantas más habilidades tienes y más desarrolladas están, más fácil es tener suerte» es la base de mi libro Skillopment