Para todos los que son fans declarados de las hojas de cálculo en general, y de Excel en particular… un bonito regalo ahora que llega la época de primavera, jardines y barbacoas.
Vía | Inspire me, now
humor
¡Es una bruja!
Ya he recurrido alguna vez a este fragmento de «Los caballeros de la mesa cuadrada (y sus locos seguidores)«, película imprescindible de los Monty Python. Pero es que me encanta.
«¡Es una bruja!». Me acuerdo de ello cada vez que alguien, basándose en sus prejuicios, es capaz de elaborar los argumentos más peregrinos (que ellos elevan a la categoría de «lógica aplastante») para «demostrar» que, efectivamente, tienen razón.
¡Hazlo tú!
Éste es un video del programa de Buenafuente en su etapa en Antena 3. En él aparece con David Mecha, la parodia que hizo Edu Soto al nadador David Meca (conocido por sus retos deportivos-espectáculo cuando menos peculiares).
La parodia del personaje consistía en presentarle como un tipo bastante «flipao» que abordaba retos ridículos como si fueran siempre la mayor hazaña del género humano. En este video, a partir del minuto 1:45, Buenafuente le dice: «Tengo entendido que vas a hacer la travesía más corta que se ha hecho jamás». Y prosigue «con todo el respeto no parece una cosa muy difícil…» Y entonces es cuando replica David Mecha indignado con su soniquete… ¡HAZLO TÚ! ¡HAZLO TÚ!
El otro día, en la discusión sobre eventos blogosféricos, no pude evitar acordarme de este personaje tras las respuestas de Octavio (éste y éste) y Juan Luis (éste y éste). «¡Hazlo tú!»
Aunque doy por sentado que nadie lo entenderá así, y especialmente los aludidos, pero para evitar malos entendidos: ni estoy diciendo que Octavio o Juan Luis sean unos «flipaos», ni que los retos que abordan son «ridículos». Simplemente, que la reacción defensiva ante la crítica me recordó la parodia: cuando lo que hice fue expresar en voz alta una reflexión creo que cuando menos pertinente (y a tenor de los comentarios, compartida por unos cuantos), parte de la reacción (no toda: hubo argumentos muy cabales) fue «menos criticar y más hacer».
Y eso es algo con lo que yo no estoy de acuerdo, ni en esta ocasión ni en ninguna: el mero hecho de hacer no debe eximir de la crítica (no vale recoger sólo los halagos y los aplausos; a esos no se les dice «menos aplaudir y más hacer»), y para hacer crítica tampoco es condición sinequanon el «haber hecho» (es como esos cineastas que descalifican a sus críticos diciendo que son unos «directores frustrados», que «nunca se han puesto detrás de una cámara y no saben lo que es eso»… y así se evitan entrar en el contenido de la crítica).
Hoy mismo hablaba con una persona, que me decía que percibía cierto «apaleamiento» cuando se criticaban las iniciativas 2.0 de algunas empresas. Que quizás no era bueno, porque así se asustaba a las empresas («y para esto no lo vuelvo a intentar»), y que quizás era mejor simplemente ignorar las malas prácticas, premiar las buenas y en todo caso aplaudir el mero hecho de intentarlo.
Pues qué queréis que os diga, no lo veo. Vale, el intentarlo merece un cierto reconocimiento. Pero cuando uno sale a la palestra, tiene que saber que va a haber críticas buenas, malas y regulares. Y las críticas malas hay que escucharlas igual que las buenas, valorarlas (no siendo que vayan a tener algo de razón; igual no la tienen, pero eso sólo se puede decidir una vez las has procesado) y procurar sacar algo positivo de ellas.
Malditos spammers
Un alegato en contra del spam:
Malditos spammers. Bastardos con nombre de chocolatina.
Pascual Funciona… ¿o no?
Esto es, cuando menos, una paradoja. Una máquina de vending de Pascual Funciona… que NO funciona. ¿En qué quedamos? ¿Funciona, o no funciona?
Ya sabéis, una de estas chorradillas que me gusta sacar de vez en cuando.
Crecí en los 80
Pedazo de canción y de video de El Reno Renardo. Los de mi generación se sentirán plenamente identificados.
Este atacazo de nostalgia a ritmo de Freak Metal os lo ofrezco gracias a Luis Rull.
Chiste tuitero
Chiste de consumo exclusivo para usuarios habituales de twitter, acostumbrados a ver «la ballenita de twitter» cada vez que la plataforma falla (que es muy a menudo, mucho más de lo que se lo toleraríamos a cualquier servicio).
Visto en Geek&Poke
Starbucks y Caprabo: dos formas distintas de ver las cosas
Este (alucinante) video pertenece a una campaña llamada refrescatuverano.com que está poniendo en marcha Starbucks con la ayuda de YKS (y en la que está involucrado Roger Casas-Alatriste). El otro día, nos invitaron a unos cuantos a un evento «Frapuccinos&vlogs» en Madrid (con barra libre en Starbucks incluída) para contarnos de qué iba, con una campaña viral en youtube (que a mí no me ha hecho mucho chís, pero que ha tenido sus adeptos) y una web para facilitar que los usuarios suban sus videos contando «cómo refrescan sus veranos».
El caso es que me llama poderosamente la atención este video, sobre todo en contraposición con lo sucedido hace unas semanas con unos empleados de Caprabo que bailaban el chikichiki. Empresa 1 (Caprabo) suspende de empleo y sueldo a unos empleados por hacer el chorra y difundirlo en internet. Empresa 2 (Starbacks) fomenta que sus empleados hagan el chorra (con paraguas y bolsa de papel en la cabeza), lo graben en video y contribuyan a una campaña de marketing.
¿Dónde habrá mejor ambiente? ¿Y cuánto de ese buen ambiente se trasladará a los clientes?
Las empresas y el sentido del humor (o su ausencia)
Leo esta noticia, y no puedo dejar de pensar en lo sosas, revenías, saborías y malajes que pueden llegar a ser las empresas.
A estas alturas, todo el mundo conoce el Chikichiki, ¿no? Pues resulta que unos empleados de Caprabo (cadena de supermercados) se grabaron haciendo una versión del chikichiki en el súper para enviársela al programa de Buenafuente. Nada grave, un poco de «hacer el ganso», de buen rollito. Y va la empresa, y les suspende de empleo y sueldo por hacer un uso inadecuado de las instalaciones.
No han robado, no han descuidado sus labores, no han faltado al trabajo, no han maltratado a sus clientes. Simplemente, bailaban el chikichiki.
¿De verdad no tiene Caprabo nada más importante que perseguir que a tres empleados que dedican un minuto a hacer el tonto? ¿Qué mensaje está lanzando la empresa a sus empleados, y al público en general, con esta medida? ¿Está el tener sentido del humor reñido con ser buenos trabajadores y buenos profesionales? Al parecer, en Caprabo es lo que piensan.
PD.- Justo en paralelo veo este post de Octavio, donde cuenta cómo en Edelman han hecho una versión del chikichiki dedicada a su metodología corporativa. El mismo chikichiki con distintos efectos (imagino).
Chorba
Otra de tonterías fotográficas (es que estoy descargando las fotos del móvil… :)).
Según la RAE, chorba es «Novio o novia de una persona». Pues tranquilos, amigos heterosexuales y amigas homosexuales: si no tenéis chorba, podéis ir al supermercado que Maggi os la vende empaquetada.
En fin, dice la Wikipedia que chorba es también una «sopa o estofado de la cocina turca que se ha internacionalizado en las diferentes gastronomías y étnias del antiguo Imperio Otomano, a menudo con significados y contenidos culinarios diferentes del original turco.»
Pues va a ser eso. Pero a mí me ha hecho gracia, soy así de simplón 🙂